Guadalajara, Jalisco.- El carácter amable y bromista es lo que distingue a Sabo Romo (CDMX, 1963), el bajista de los legendarios Caifanes, quien, además, promueve, produce, es músico de sesión y está siempre abierto a novedades y estilos, inquietudes musicales que lo han llevado a participar en casi 200 discos.
Sobre Caifanes, considerada como la mejor banda de rock mexicano en la historia del movimiento, «es y siempre será mi hogar«, comentó.
Aseguró que a su generación le tocó «hacer música muy chingona» que sigue gustando a quienes vivieron su adolescencia en los 80’s y a los jóvenes de hoy, que conocen y disfrutan las piezas creadas por los rockeros nacionales en la década en que, por fin, hubo apertura en el país hacia las creaciones de grupos mexicanos y de otros países latinoamericanos y de España.
Durante una entrevista exclusiva con MetrópoliMX Jalisco, Sabo comenzó por bromear con el reportero tras fingir que iba a cortar la llamada. Pasado el susto, habló de su más reciente proyecto, Sa’n’Ta, que graba junto a Tania Libertad.
MetrópoliMX: Tu nombre está ligado al rock nacional, ¿por qué grabar un disco con la peruana Tania Libertad?
Sabo Romo: Por amistad. Tras 30 años de ser amigos, habíamos hecho muchos discos juntos y llegamos a la conclusión de hacer un disco de esta naturaleza, con esta clase de canciones tan emotivas, tan bien escritas, tan ad hoc a los tiempos. Empezó con una canción, que es «Las Esperanzas«, y entonces me volteo y le digo: «Querida, hay que hacer un disco«. Y bueno estamos en ese proceso, en el que la primera parte de este disco saldrá en noviembre, que son cinco canciones, luego vendrá la segunda parte con otras cinco canciones y, eventualmente, comenzaremos a tocar en vivo. Cabe mencionar que este proyecto lo presentamos el año pasado en Vive Latino, básicamente porque eso resume mi carrera de casi cuarenta años. No es la primera vez que me meto en un género como este en los casi 200 discos que he grabado en mi carrera. Hay muchas cosas que la gente ni sabe y de seguro ni se imaginan: yo he sido parte de discos de Sin Bandera, de Natalia Lafourcade, de Marcial Alejandro, de Moenia, de Benny Ibarra, de Aleks Syntek; de muchos artistas, de muchos cantantes y de muchos compositores, que afortunadamente somos amigos y podemos compartir música. Y, además, me proveen de la oportunidad de poner en práctica mi conocimiento como músico y productor, porque también, y por encima de cualquier cosa, soy músico. Sí estoy ligado al rock nacional, al rock latinoamericano, pero al final, mi oficio de hacer música abarca todos los géneros que me gustan, toda la música de la que puedo aprender algo, y así ha sido desde hace casi 40 años.

Consideró que hacer el disco con Tania Libertad es, citando al creador de Mafalda, Quino: «el continuóse del empezóse«.
MetrópoliMX: También estás muy activo con Rock en tu Idioma Sinfónico. La actividad ahí se interrumpió con la pandemia, pero, ¿qué es lo que sigue para ese proyecto?
Sabo Romo: Se nos quedó en el tintero la tercera entrega de Rock en tu Idioma Sinfónico, pero decidimos por un lado, y con un poco de incertidumbre, y luego de comprobar que somos buenos y capaces de hacer un disco a la distancia, hacer un disco en el que decidimos perpetuar algunas de la canciones que si buen no forman parte del sinfónico a nivel de disco, sí forman parte de nuestros conciertos a lo largo y ancho del país por espacio de cinco años, entonces grabamos varias rolas a la distancia, y entonces lo único que tenemos que hacer es ser necios y continuar, porque de otra manera sí nos habríamos marchitado terrible en esta pandemia. Evidentemente la pandemia, sin música ni literatura, para mucha gente fue terrorífica. Pero para muchos de nosotros no; la música y la literatura, es lo que nos ha salvado de vivir tal vez en una situación precaria. Ahora mismo también nos salvó el ánimo, nos salvó las ganas de seguir haciendo; presentamos este disco en el Auditorio Nacional hace un mes, tocando con el Auditorio Nacional vacío, pero conscientes de que es el octavo Auditorio Nacional que hacíamos con el proyecto de Rock en tu Idioma, y que todo esto está a la par de todas las actividades que hacemos, porque finalmente, en mayor o menor medida, Rostros Ocultos está activo, Ritmo Peligroso, está activo celebrando 40 años de carrera con un álbum sensacional, Bon (de Bon y los Enemigos del Silencio) regresa a los escenarios después de algunos años no de estar inactivo pero sí de estar un poco ahí, detrás de las lámparas… Los Neón, igual, y Humberto Calderón, es nuestro socio creativo de muchos proyectos y guitarrista de Neón, manager en México de Aterciopelados y de Los Amigos Invisibles, y junto con Eliseo Reyna, que maneja todo lo que yo hago, estamos manejando Sa’n’Ta con Tania Libertad, y hago contribuciones… no me lo has preguntado, pero puedo aprovechar y decirte que en esta pandemia, me la he pasado muy bien. Muy, muy, muy bien. Si he tenido un par de momentos gachos, pensando en si la gente va a querer salir de su casa para ir a un concierto, pensando en si yo mismo voy a salir de mi casa para ir a un concierto, tras este confort de vivir en domingo desde hace 8 meses.
Sabo comentó que está rodeado de gente tan encomiable que no le da tiempo de «ni de pensar chueco«, porque hay asuntos qué atender, hay asuntos qué resolver, música qué inventar, arreglos por terminar y seguir con un grupo proyecto llamado Aua (que ya tiene disco y película), en el que hace dueto con su oftalmólogo, quien resultó ser, a decir de Sabo, «un músico espléndido«, con un estilo ecléctico que ha tenido excelente recepción en países como Argentina, Alemania y España.
Se dijo orgulloso de lo que en estos momentos está pasando con su vida artística.

MetropoliMX: Sabo, el éxito de Rock en tu Idioma Sinfónico lo atribuyes ¿a qué?, ¿a que muchos de nuestra edad sienten nostalgia por aquellos tiempos de los 80’s y que a los jóvenes de ahora les encanta esa música a falta de opciones modernas, o a qué se atribuye el éxito de RETI?
Sabo Romo: Pues mira: es todo eso que acabas de decir más algo del que no tengo otro adjetivo para describirlo: el hecho de que, afortunadamente, somos muy chingones y hemos sido capaces de hacer música muy chingona que ha superado el paso del tiempo. Lo acabas de decir muy bien. Hay quien lo ve meramente como nostalgia, pero para la gente más joven, es absolutamente nuevo, y para nosotros es, una vez más, el continuóse del empezóse; es poder llevar a ese estado de gracia maravilloso, con el arrobo de las cuerdas, los violines, los chelos, los cornos y otros instrumentos un puñado de canciones maravillosas. Si alguien quiere filosofía, pues que lean Platón, o que lean a Séneca, que no nos estén chingando, porque finalmente nuestra música escrita en esa parte de los 80’s, es lúdica y tiene ese carácter del rock and roll, con el que fue creado, que es lúdico, que es de diversión, que es de compartir, que es de bailar; de eso. Es lo que hemos hecho a lo largo de tantos años.
Se congratuló de haber tenido un primer volumen de RETI con gente a la que admira, entre ellos a Marciano Cantero (Enanitos Verdes) a Leonardo de Lozanne (Fobia), el Cala (de los tapatíos Rostros Ocultos), Neón, entre otros.
Comentó que se puede pensar que «es un proyecto de cuates, de merecimiento«, y agregó que él no se aparta que es un negocio que debe generar dividendos a quienes la generan.
Sabo Romo: Finalmente, de ello vivimos o nos hemos mantenido muchos años. Quien piensa en otra forma está descartado… Al final, Rock en tu Idioma, es un proyecto de todos, con las canciones de todos; es un proyecto que ha sacado a flote muchas canciones que le han puesto cara a esas mismas canciones que se pasaron 30 años sin tener un rostro. Ahora lo tienen. A muchos de esos artistas les proveyó de un disco de oro, de un disco de platino que tal vez en su carrera regular, en 1987, nunca tuvieron… Muy bienvenido, porque finalmente de eso se trata. Yo soy un convencido: la música gratis, nunca; de ninguna manera y por ninguna circunstancia. Si esto contribuye de alguna forma a coadyuvar a que la música, igual que la arquitectura y que la literatura, es un modus vivendi para mucha gente, y la industria se compone de mucha gente, no solamente somos los músicos que salimos al escenario. Es mucha gente, y esto tiene que ser redituable.
Sabo es tajante: reprueba cualquier manera de obtención de la música de los artistas de manera gratuita. «Eso es robar, es su nombre«, sentencia. «La música hay que comprarla, y aunque ya está hecho el daño a través de algunas plataformas digitales, en los que puedes obtener la música robada, porque así se dice, de diferentes lugares, hay a quien le parece que la música per se no tiene que ser gratuita«.
Por lo anterior, lo entusiasma que el primer volumen de Rock en tu Idioma Sinfónico vendió 150 mil discos físicos, no descargas, en tiempos en que algo así ya es muy complicado de lograr.
Por el disco hicieron una gira de 80 presentaciones, y la pandemia tiró el plan de girar por Estados Unidos por primera vez, gira que tenía contratados 20 shows, que espera retomar el año entrante.
MetrópoliMX: Un integrante de un grupo de covers, de una media de edad de 21 años, traían un repertorio compuesto por las bandas de los 80’s, principalmente Caifanes. Uno de ellos me aseguró que la música actual no gustaba, que lo que gustaba era lo que habían hecho ustedes, ¿qué opinas de eso?

Sabo Romo: Puede ser. Me parece una visión muy radical y respetable, pero yo creo que todas las músicas actuales, aunque ahora está lleno de lo mismo, es decir, hay mucha música de un mismo género, hablo del urbano, hablo del regional, hablo de los corridos, de la música norteña, de la música de banda, que es lo que tiene copado el mercado, merecen echarse un clavadito y encuentras canciones sensacionales. Hay música sensacional en medio de todo eso. De verdad. Me queda claro que incluso muchos colegas contemporáneos tienen prejuicios al respecto y a lo mejor no son capaces de sentarse a escuchar el nuevo disco de Ana Bárbara. Trae canciones buenísimas, muy bonitas, hay que decirlo. O el nuevo disco de Río Roma, y trae un par de baladas sensacionales, y esa es mi apreciación. Igual me gusta mucho el nuevo sencillo de (Aleks) Syntek, o te puedo hablar del sencillo de Caifanes que hicimos el año pasado. Yo lo que siento, es se perdió un poco esta capacidad antropológica de compartir un cassette en el que iba tu selección, eso que hoy pomposamente llaman playlist. Eso no ha dejado de pasar, pero a diferencia de nosotros, los de antaño, hay mucha gente que no se da el tiempo de sentarse, de aplastarse, a escuchar un disco. Ahora todo, es inmediato, y si oyes ocho segundos de una canción y no te atrapó, no eres capaz de esperar a de llegar al coro, para ver si algo pasa, para ver si la letra tiene algo que te embone, algo que se ajuste a tu pensamiento. Te quedas con «es una mierda«, y se acabó, ¿no? Todo pasa muy rápido, y en ese «todo pasa muy rápido«, nos perdemos de un montón de cosas.
Dijo sentirse muy orgulloso de que la gente joven pueda vivir de tocar las canciones que hizo junto a Caifanes. «Mayor homenaje que ese yo creo que no puede haber«, dice.
Comentó que en diversos países de América Latina ha llegado a bares y el grupo que se presenta interpreta sus canciones «mejor que nosotros (Caifanes)«.
Se alegró que su música sea la tabla de salvación de muchas personas.
MetrópoliMX: ¿Qué se siente ser parte de Caifanes?
Sabo Romo: Era una especie de banda versátil en cuanto a su origen que nos permitió hacer lo que no habíamos podido hacer en otro grupos, y nos permitió poner en práctica todo nuestro conocimiento como músicos y creativos, como simples músicos capaces de hacer música emocionante. Lo natural en la vida no es ser parte de una banda trascendental como Caifanes. Para mí, lo natural en la vida es ser parte de una banda que es, ha sido y será mi hogar por muchos años, y que hemos tenido la fortuna de participar en muchas situaciones, que han habido muchos conflictos, y yo de repente no podía entender cómo habían podido volver ellos tres (Saúl Hernández, Alfonso André y Diego Herrera) después de haberse separado como lo hicieron.
Agregó que la separación entre conflictos de Caifanes se dio porque «como dice la abuela, lo que mal empieza, mal acaba«. Hubo una parte de ese principio que llevó su sonido al primer disco, que abrió una puerta «por la que atrás de nosotros se coló un montón de gente y eso está increíble, porque fue abrir la puerta para todos, no nomás para uno«.
Caifanes tuvo espacios inéditos en la televisión, en la radio, en las revistas, en las bandas y hasta en el gusto de la gente, abriendo brecha a otros muchos grupos, agregó.
MetrópoliMX: ¿Qué es lo que sigue para Sabo Romo? ¿Componer, grabar, colaborar con otros músicos?
Sabo Romo: Exactamente lo que acabas de decir, ¿no quieres ser mi manager? Todo lo que acabas de mencionar, es lo que haré. Seguiré llevando lo que sé hacer a donde quiera que lo haga, porque esa ha sido mi formación a lo largo de 40 años. Suena rudo, pero es la realidad: el año que entra cumplo 40 años de carrera. Es decir, 40 años de navegar haciendo lo que hago por todos lados. Veo para atrás, y veo tantas cosas, tantos discos entrañables y sensacionales, veo tanta música y tantos amigos que aquí están y otros tantos que ya no están… Pero, finalmente, veo un valle precioso por donde he transitado por muchos años. Tengo la fortuna de tener a mi padre conmigo, quien ha sido un artífice importante en cada cosa que yo he hecho en mi vida, al igual que mis hermanos y mi familia y amigos. Quiero seguir buscando la oportunidad de seguir haciendo música para entretener, y ahora salimos con Rock en tu Idioma Eléctrico, salgo con Sa’n’Ta, estamos rehaciendo el empaque del album de Aua; seguramente algo pasará pronto con los Caifanes, pero el hecho es que somos inquietos… voy a seguir haciendo música, voy a seguir haciendo lo que me da la gana hasta que me lleve la chingada, ni más ni menos.