Cuando un ‘vocho’ cruzó Chapala

El domingo 8 de septiembre de 1968 acudió una multitud a presenciar la demostración del vocho nadador.

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Guadalajara/Jalisco/Noticias.-Los retos pueden llevar a hacer cosas impensables e increíbles. Tal fue el caso del Volkswagen Sedán que fue adaptado para cruzar, sin otra cosa que su propia potencia, el lago de Chapala.

En 1968, a los ejecutivos del concesionario Volkswagen Américas, en Guadalajara, se les ocurrió demostrar que el Vocho era capaz de flotar en el agua sin presentar daños.


El acto serviría como una gran campaña publicitaria.

Se destinó para ello un Sedán 1967 al que le hicieron adaptaciones, como sellar perfectamente el chasis, proteger el motor y la transmisión.

También adaptaron una propela de lancha al motor, y fabricaron una tubería de escape más larga para que el agua no ingresara a los cilindros.

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El auto fue probado primero en un estanque hecho a propósito para tal fin en los talleres de la agencia de VW. Posteriormente en el pequeño lago del Parque Ávila Camacho, localizado en el cruce de esa avenida y Patria, en Guadalajara.
También se hicieron pruebas en la Laguna de Cajititlán, en Tlajomulco.

Más tarde, fue ya en las aguas de Chapala donde se hicieron las pruebas que precederían el reto final.

El domingo 8 de septiembre de 1968 acudió una multitud a presenciar la demostración del vocho nadador.

El recorrido inició en San Luis Soyatlán, en la ribera sur del lago, desde donde el improvisado barquito llegó a Ajijic, y finalmente a Chapala.

El auto fue navegado por un técnico, y un buzo acompañaba el recorrido bajo el agua revisando que no hubieran fallas.

El vocho llegó a Chapala después de navegar 24 kilómetros en 5 horas. El coche adaptado no presentó ningún contratiempo o falla atribuible a la prueba en el agua, aunque por momentos se dudó de que pudiese completar la ruta.

Luego de la hazaña, regresaron el vehículo a su estado original y lo vendieron sin mayor contemplación a un anónimo comprador. Se desconoce el fin que tuvo el vocho que cruzó Chapala; sólo queda testimonio gráfico de lo conseguido.

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