Guadalajara/Jalisco/Noticias.- En Guadalajara, el colegio católico Gómez Farías aprovecha los mecanismos legales para no devolver la cuota de inscripción a los padres que deciden retirar a los alumnos de esa escuela.
Sin contestar llamadas y dando largas, como explicaciones, dejan pasar los tres meses estipulados, para quedarse con el dinero. Así lo denunció una madre de familia, evidenciando conversaciones de whatsapp.
El párroco de la iglesia San Joaquín, es quien administra el colegio, que está a un costado de la iglesia.
El modus operandi que denunció una madre de familia, Isabel Dueñas, es que la dirección de la escuela aprovecha el lapso de tres meses obligatorio para recuperar la inscripción.
La administración de la escuela prolonga las respuestas y los trámites, hasta pasado el periodo, con lo cual se hace imposible recuperar, legalmente, el dinero.
La madre de familia afirmó que en el ciclo que comienza, la institución no dio planes de estudios, por lo que decidió sacar a su menor de la misma. Sin embargo, se negaron a devolverle la cuota de inscripción.
Intentó acudir a la PROFECO, pero la institución pública no da citas, debido a la pandemia, y por ello, es probable que, ante la falta de apoyos, no recupere la inscripción.