Guadalajara, Jalisco.- Gabriela Escamilla Zenteno fue víctima de una injusta paradoja: cuando presentó una denuncia penal por el delito de abuso sexual del que fue víctima su sobrina de 6 años, terminó tras las rejas.
El pasado 14 de diciembre por la noche fue liberada tras ser detenida y encarcelada de manera injusta.
Todo comenzó cuando se dio cuenta que la pequeña presentaba indicios de abuso sexual tras convivir con su sobrina.
La niña, según la denuncia, confesó que el autor del abuso sexual era su propio padre, identificado como Gabriel Escamilla Zenteno, propietario de la compañía «Material Hospitalario de Occidente S. de R.L de C.V» y «Gez Inovation Sock, S de R.L de C.V».
El abusador es hermano de Gabriela, de nombre casi homónimo, Gabriel. Además, la niña es golpeada por su propia madre.
Sin embargo, la tía decidió tomar una fotografía de las huellas de violencia sexual en el cuerpo de la niña, buscando presentar pruebas contra su hermano, quien es proveedor del Gobierno del Estado de Jalisco y presume tener tener poder e influencias del gobernador Enrique Alfaro Ramírez.
La tía de la víctima apenas en noviembre de 2021 presentó la denuncia correspondiente en la Fiscalía del Estado de Jalisco.
Sin embargo, el caso sospechosamente fue archivado, según la defensa de Gabriela Escamilla.
La tía insistió y metió presión para que el caso se investigara, pero su persistencia fue contraproducente.
El agente del Ministerio Público de la Fiscalía del Estado de Jalisco, Ángel Eduardo Capilla, además de amenazarla, utilizó la fotografía del abuso sexual que ella había tomado como prueba para acusarla bajo los lineamientos de la Ley Olimpia, creada para quien almacene y difunda contenido intimo, real o alterado sin el consentimiento de quien aparece en fotografías o videos .
El funcionario alegó que la foto violaba la intimidad sexual de la niña: “El caso no es que la señora vaya tomando fotografías a las partes íntimas de los niños, sino que lo hizo a su sobrina en un contexto donde consideró ella prudente para poder denunciar y tener los elementos y decir ‘miren aquí está pasando esto’ y ese contexto no se tomó en cuenta”.
Señalada por esa acusación, el pasado 16 de diciembre, Gabriela tuvo una audiencia preliminar, siendo detenida por cinco días hasta determinar si era o no vinculada a proceso penal.
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Desde entonces, hubo varias protestas de asociaciones civiles, como Coepaliztli, A.C y de sus familiares demandando su liberación, ya que consideraron que fue criminalizada por querer justicia en un ilícito.
Tras una larga audiencia de casi 9 horas, el Juez Felipe de Jesús Rivera consideró que no había elementos que probaran algún dolo, cuando la mujer tomó la fotografía del abuso sexual contra la niña.
La Fiscalía del Estado de Jalisco, nunca pudo probar que la imagen se hubiera tomado para otra cosa que no fuera tener elementos acusatorios contra el padre abusador sexual.
Por esta situación, Gabriela Escamilla fue liberada.
Sin embargo, todavía esta en riesgo que su hermano, el violador pueda apelar la decisión del juez, por lo que los abogados de la tía dicen que continuarán con su defensa.
El juez reconoció lo endeble y deficiente de la investigación de la Fiscalía del Estado de Jalisco.
El Fiscal del Estado de Jalisco, Luis Joaquín Méndez Ruíz, parece proteger la fechoría del Agente del Ministerio Público, Ángel Eduardo Capilla y el abuso sexual del empresario contra su propia hija, Gabriel Escamilla Zenteno.
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