Zapopan/Jalisco/Noticias.- Martha Leticia Cardona Silva, es una de las más de 350 familias afectadas que dejó el desbordamiento del Río El Seco, en Zapopan. Aquí, en la finca marcada con el número 2766 de la calle Puerto Batabambo, en la colonia Miramar, no quedó nada de lo que tenía.
«Todo se perdió, todo se desmontó hasta la cocina integral, imagínate. Sin nada, mija me quedé, nada, es nada de nada, ni closet, ni puertas, ni ventanas, ni vidrios, porque hasta eso se quebró. La ropa también se perdió. Ahorita todavía estamos en el lodo«, lamentó.
Desde 1994, Martha Leticia ha sido vecina de la colonia Miramar. Nunca habían vivido algo similar a lo que hoy enfrentan. «No, no, nunca había ocurrido esto, como una avalancha, una tromba, no sé como decirlo«, expresó afligida.
Aquel sábado, ella no estaba en casa. Su hija sí, por lo que decidió llamarla por teléfono para saber de ella. «Estaba llorando porque el agua se estaba metiendo, era más de metro y medio de altura; el río se estaba desbordando. Ella corrió y estaba a media calle arriba, porque como la calle esta de subidita, ella se fue corriendo para arriba para refugiarse en lo más alto, y no ser arrastrada«, contó la mujer.
En menos de cinco minutos, el lodo invadió su propiedad y acabó con su patrimonio. Personal de Protección Civil la auxilió a sacar el lodo, y bomberos a destapar el drenaje, pero «se volvió a tapar con las lluvias que siguen habiendo, se volvió a inundar. Entonces, anoche llovió, y las alcantarillas y el drenaje están tapadas«. La historia se repitió y se corre el riesgo que se repita durante este temporal.
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Martha considera que hace falta la ayuda del Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) para que desazolve. «Es ahí donde está el problema, hay que destapar el drenaje que sigue tapado. En el arroyo todavía hay piedras, escombros y lodo, mucho lodo«, insistió.
La casa de Martha Leticia, no tiene daño estructural y se puede habitar. Protección Civil le dijo que su «casa no tiene nada, y si, no tiene nada, pero me quedé sin nada. El piso se me rajó, se partió«, denunció.
Mientras rescata lo que puede de su casa, Martha Leticia Cardona Silva, vecina desde hace 27 años en la colonia Miramar, piensa en qué fue lo que pudo haber pasado, pero «mija no hay de otra», es la deforestación del Bosque de la Primavera.
«Estamos cerca, yo considero que por la deforestación y toda la basura que se generó por el incendio, y esas cosas son las que taparon el cauce del arroyo, y con la basura que ya estaba, pues lo arrastró y eso hizo que el río se desbordara«, consideró.
Durante el día, la mujer permanece entre el lodo. En la noche duerme en casa de su hermana. «Solo han venido a revisar, a tomar fotos pero no han dicho cuándo entregarán la ayuda que requerimos. No nos han dicho nada, nada, mucho menos fechas«, comentó.
Pero el apoyo de SIAPA es crucial, que «vengan a desazolvar los drenajes, desde la red principal, y líneas de alcantarillado es prioridad. No podemos lavar nada porque ¿a dónde se va el agua?«, cuestionó.
